MERCA HOBBY - MERCADO MENSUAL EN BARCELONA

Desde hace mas de diez años se puede hablar de una feria de coleccionismo ya consolidada: MERCA HOBBY. En esta estupenda plaza porchada del barcelonés barrio de Sant Andreu cada primer domingo de mes, a excepción del mes de agosto, se celebra un gran mercado de juguetes viejos. Aquí, se puede comprar, vender y cambiar trenes, coches, aviones, soldados, figuras, libros, revistas, muñecas, juguetes y material de modelismo… SCALEXTRIC, PAYA, IBERTREN, REAMSA, JECSAN, COMANSI, RICO, EXIN, AIRFIX, ESCI, BUM… Los vendedores y los compradores vienen de muy distintos lugares de la geografía española y, como no, este mercadillo es conocido por aficionados extranjeros que acuden a la cita aprovechando la estancia en Barcelona y alrededores. Se puede llegar hasta la feria fácilmente desde la estación de metro “La Sagrera”. Gracias a este mercadillo se han formado algunas asociaciones, se han creado grupos de amigos. Es mucho más fácil coleccionar cualquier tipo de juguete. Se hace más cómodo encontrar “esa pieza tan especial” que tanta falta nos hace. Bueno amigos, si estais chalados por esta gran afición, allí nos tenéis. Una gran ocasión para conocer nuevos comerciantes, nuevos coleccionistas con los que intercambiar. Un mundo nuevo para todo aquel que no se ha acercado por MASADAS. Pero desde hace ya algunos meses "pintan bastos" y todo gracias a las dichosas normativas, envidias y contradicciones. Por un lado el mercadillo proporciona a la zona unos buenos ingresos a bares y comercios de la zona. Se han creado empleos y el mérito se lo deben a las personas que con su ilusión forman este fenómeno social. Si nos remontamos a años atrás la zona no valía un duro pero, al llegar el mercadillo, se inició un comercio emergente en un principio bienvenido y actualmente molesto. Parece como si no quisiéramos comer ni dejar comer. Ahora, los vecinos, no sin razón, la ineficacia de los pensadores de la organización y la clase gobernante pueden poner en peligro esta fiesta mensual del coleccionismo. El mercado abre "sus puertas" a las diez, dando al traste con el plan dominical de muchos de los clientes que venían a primera hora y luego se volvían a sus casas para pasar la mañana con la familia. Muchos de los comerciantes traen sus mesas (dentro de las medidas dictadas por la organización. Ahora dicen que no, que las mesas tienen que ser las que se proporcionan tras hacer cola (que nos recuerda la triste cola del pan que nos contaban nuestros padres). Y todo esto, todas estas prohibiciones, reglamentos y leyes nos calientan la testera y mucho, mientras vemos que unas personas que intentan aventuras comerciales con toda una serie de trabanquetas por parte de ayuntamientos, gobiernos y asociaciones mercenarias aguantan y aguantan en un paisaje de persianas cerradas a diario, comercios centenarios que anuncian su punto final y fabricantes que se ven obligados dejar de fabricar porque su gobierno ó su ayuntamiento les ha estafado, les ha cobrado por humo y al final los ha dejado en la cuerda floja y con deudas insuperables. Masadas antes no era nada y hoy, el primer domingo de mes se convierte en un fenómeno social... no lo estropeen. Hagan el favor de mimarlo y cuidarlo con celo. La afición se lo agradecerá y la gente que trabaja ese domingo también.
Esta fiesta ha costado muchos esfuerzos no sin recompensa. No vayamos ahora a enviarlo todo al carajo. Vamos a continuar trabajando para que todo el mundo esté contento y para lograr que este tradicional mercadillo de ilusiones sea motivo de orgullo. Masadas comienza a tener fuerza y necesita un impulso de buenas voluntades por parte de la administración, la organización, los comerciantes y la vecindad.

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